viernes, 3 de abril de 2015

Torrijas de Leche



Hoy Viernes Santo y como cada Semana Santa no pueden faltar las torrijas en casa. Las torrijas son una receta que se remonta al siglo XV y que tiene muchas variantes, hay a quien les gusta de vino y otros de leche..., con miel o con almibar o simplemente con azúcar y canela, rellenas o sin rellenar... Parece mentira que una simple receta de aprovechamiento del pan, pueda dar tanto juego y por supuesto que esté tan buena.

En esta ocasión he hecho Torrijas de leche espolvoreadas con azúcar y canela. Son muy fáciles de hacer, así que aquí os dejo la receta para que os animéis y las probéis.

Ingredientes:

- Una barra de pan para torrijas.
- 1/1'5 litros de leche.
- 1 palo de canela.
- 3 cucharadas de azúcar por litro de leche.
- La piel de un limón.
- 4 huevos para rebozar.
- Aceite de oliva suave para freir las torrijas.
- Más azúcar y canela en polvo para espolvorear.


Preparación:

Cortamos el pan en rebanadas de 1'5 a 2 cm de grosor, el pan no debe ser del día, si es fresco es mejor dejarlo mínimo de un día para otro, de esta forma el pan absorverá más leche y las torrijas quedarán mucho más jugosas. Una vez que tenemos las rebanadas las ponemos en una fuente un poco honda y bien extendidas (si es necesario las ponemos en varias fuentes para que tengan suficiente espacio y se puedan empapar bien).

Ponemos en un cazo la leche junto con el azúcar, el palo de canela y la piel del limón y la llevamos a ebullición, cuando ha llegado este punto lo apartamos y la dejamos unos minutos infusionar, para que coja mucho más sabor.

Pasado unos minutos, retiramos el palo de la canela y la piel del limón de la leche y la vertemos sobre nuestras rebanadas de pan y lo dejamos que se empapen bien, por lo menos una hora. Es importante que se empape todo el pan, ya que si se queda el centro sin empapar luego estará seco.

Cuando pase la hora o veamos que toda la leche se ha absorbido bien, preparamos el aceite en una sarten amplia, deberemos poner como un dedo de aceite, y lo ponemos a calentar a fuego medio-bajo. Mientras preparamos los huevos, para ello los batimos en un plato hondo o una fuente, para que nos dejen maniobrar bien las torrijas.

Cuando el aceite esté caliente, pero sin humear, cogemos las torrijas las pasamos bien por el huevo y las freimos. Una vez fritas por ambos lados las sacamos sobre papel absorvente para que suelte el exceso de aceite y cuando se templen un poco las vamos pasando por el azúcar con canela que habremos preparado previamente en un cuenco.

Y ya tenéis vuestras torrijas listas para servir y comer.

Espero que las disfrutéis...

Un beso y hasta pronto.

Sonia


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